Investigator
Curioso
Hola a todos,
Soy nuevo en el Foro y permitidme que someta a vuestra consideración mi particular y humilde visión de la problemática con la que se encuentra la Pyme industrial a la hora de seleccionar ese ERP que le va a permitir mejorar la gestión y la competitividad de su negocio.
Soy ingeniero industrial, me dedico a la investigación y llevo una buena porción de años dedicado a tratar de analizar los escollos que impiden que las empresas industriales encuentren el software de gestión más adecuado a las necesidades de su modelo de actividad.
En primer lugar he hecho mía la consecuencia obtenida del trato con los gerentes de las Pymes de fabricación en el sentido de que la condición necesaria pero no suficiente para adoptar un determinado ERP en su empresa es que su módulo de gestión de la producción (Manufacturing) sea capaz de plasmar y gestionar su modelo de producción.
Si tras una demo, recibe el visto bueno de la organización, es el momento de seguir analizando la aplicación. De lo contrario es preferible no continuar.
Estoy refiriéndome a las Pymes, esas empresas de recursos limitados que no pueden andarse con frivolidades a la hora de realizar una inversión tan importante como es la adquisición, puesta en marcha y explotación de un sistema tan complejo como puede llegar a ser un ERP.
Existen casi tantas maneras de fabricar como empresas hay. Tras analizar las soluciones que ofrece el mercado solamente existen tres cauces posibles para hacerse cargo del modelo de producción de una empresa industrial:
- Solución vertical
- Modelo para industria discreta
- Modelos para industria de proceso
La solución vertical es la que más ha de acercarse al modelo de negocio y por lo tanto es la que requiere menos adaptaciones. Los modelos discreto y de proceso precisan de adaptaciones más serias en el mismo momento que el modelo de producción de la empresa no puede ser alcanzado tras la parametrización del software.
Pero ocurre con gran frecuencia que la Pyme tiene un modelo de producción que no se corresponde ni con el de fabricación discreta ni con la industria de proceso. Se da muy a menudo un modelo híbrido que se sitúa a caballo entre uno y otro, tanto en cuanto a las estructuras de los procesos en sí como en cuanto al flujo de materiales o las distintas estrategias de producción.
Estos tipos de proceso suelen albergar alguna transformación y pueden aflorar varios productos de manera simultánea (productos y co-productos).
A modo de ejemplo, citaré sectores como el despiece de animales, la piedra natural, el oleícola, la calderería, la industria conservera, la industria de la cerámica y también cualquier otro en el que se procese una materia prima que contenga implícitas distintas calidades y que una vez tratada dará lugar a diferentes productos en el mismo proceso.
Las soluciones verticales del mercado, como es lógico, han sido desarrolladas para sectores con un peso específico importante y sus características funcionales y económicas no suelen estar al alcance de la Pyme.
En cuanto a las aplicaciones “estándar”, hoy en día estamos viviendo una concentración en el mercado del ERP hacia las soluciones que ofrecen las multinacionales del software. Las empresas de fabricantes nacionales son adquiridas por las multinacionales, más para hacerse con la cartera de clientes y eliminar un competidor que para asimilar el conocimiento de gestión que éstas puedan aportar.
También es importante considerar que las aplicaciones de las multinacionales han sido desarrolladas para satisfacer las necesidades de empresas que son o fueron “grandes cuentas”.
Así pues, la Pyme se ve, cada vez más, abocada a tener que escoger entre las grandes aplicaciones de las multinacionales cuando muchas veces no tiene capacidad financiera para pagar un barco tan grande, ni la tripulación necesaria y ni mucho menos puede pagar las modificaciones en una nave que salió del astillero con unos horizontes de gestión amplios, pero que pueden no ser capaces de contemplar el modelo de organización que se plantea a un coste razonable.
A la vista de esta situación, que no es nueva pero que va a más, el grupo privado de investigación al que pertenezco ha decidido echarle valor al asunto y diseñar a partir de nuestra experiencia y capacidad investigadora y desde cero una aplicación de gestión específica para las Pymes industriales.
Hemos empezado investigando y desarrollando una nueva metodología para definir y gestionar la estructura de cualquier proceso o producto, de manera que, gracias a su abstracción de diseño, tenga cabida cualquier modelo de producción, tanto el modelo discreto como el de proceso o cualquiera que se encuentre entre ellos (híbrido) y además con elevado nivel de control sobre los parámetros clave del negocio industrial.
Pretendemos integrar este sistema con otros subsistemas como SCM o APS para dar lugar a un nuevo marco de gestión de la producción adaptativo, prospectivo y conducido por la demanda (Universal Manufacturing) que ponga al alcance de la Pyme esa plasticidad funcional que necesita, sin pagar más tributo que el de definir sus necesidades.
En última instancia esta línea de investigación pretende transferir sus resultados a la empresa, armonizar la relación entre la Pyme y los ERP y facilitar la adopción de estas herramientas de gestión como factor de competitividad.
Pensamos también que estas iniciativas de I+D+i, que cualquiera podría opinar que van a contracorriente de esa tendencia a la concentración y dominio del mercado por parte de las multinacionales del software, son las que nuestro país necesita para progresar a medio y largo plazo. Que no hay que tirar la toalla y que hay que estar ahí. Tenemos en este país gente muy preparada que, precisamente en este cambio de ciclo económico, no debe desaprovecharse bajo ningún concepto. Probablemente sea el momento de fomentar el I+D nacional pero de verdad, sin discursos políticos y con fundamento.
Animo a los emprendedores y a los inversores a trabajar para ello, que de capital humano creativo y bien formado estamos sobrados.
Saludos,
Investigator
Soy nuevo en el Foro y permitidme que someta a vuestra consideración mi particular y humilde visión de la problemática con la que se encuentra la Pyme industrial a la hora de seleccionar ese ERP que le va a permitir mejorar la gestión y la competitividad de su negocio.
Soy ingeniero industrial, me dedico a la investigación y llevo una buena porción de años dedicado a tratar de analizar los escollos que impiden que las empresas industriales encuentren el software de gestión más adecuado a las necesidades de su modelo de actividad.
En primer lugar he hecho mía la consecuencia obtenida del trato con los gerentes de las Pymes de fabricación en el sentido de que la condición necesaria pero no suficiente para adoptar un determinado ERP en su empresa es que su módulo de gestión de la producción (Manufacturing) sea capaz de plasmar y gestionar su modelo de producción.
Si tras una demo, recibe el visto bueno de la organización, es el momento de seguir analizando la aplicación. De lo contrario es preferible no continuar.
Estoy refiriéndome a las Pymes, esas empresas de recursos limitados que no pueden andarse con frivolidades a la hora de realizar una inversión tan importante como es la adquisición, puesta en marcha y explotación de un sistema tan complejo como puede llegar a ser un ERP.
Existen casi tantas maneras de fabricar como empresas hay. Tras analizar las soluciones que ofrece el mercado solamente existen tres cauces posibles para hacerse cargo del modelo de producción de una empresa industrial:
- Solución vertical
- Modelo para industria discreta
- Modelos para industria de proceso
La solución vertical es la que más ha de acercarse al modelo de negocio y por lo tanto es la que requiere menos adaptaciones. Los modelos discreto y de proceso precisan de adaptaciones más serias en el mismo momento que el modelo de producción de la empresa no puede ser alcanzado tras la parametrización del software.
Pero ocurre con gran frecuencia que la Pyme tiene un modelo de producción que no se corresponde ni con el de fabricación discreta ni con la industria de proceso. Se da muy a menudo un modelo híbrido que se sitúa a caballo entre uno y otro, tanto en cuanto a las estructuras de los procesos en sí como en cuanto al flujo de materiales o las distintas estrategias de producción.
Estos tipos de proceso suelen albergar alguna transformación y pueden aflorar varios productos de manera simultánea (productos y co-productos).
A modo de ejemplo, citaré sectores como el despiece de animales, la piedra natural, el oleícola, la calderería, la industria conservera, la industria de la cerámica y también cualquier otro en el que se procese una materia prima que contenga implícitas distintas calidades y que una vez tratada dará lugar a diferentes productos en el mismo proceso.
Las soluciones verticales del mercado, como es lógico, han sido desarrolladas para sectores con un peso específico importante y sus características funcionales y económicas no suelen estar al alcance de la Pyme.
En cuanto a las aplicaciones “estándar”, hoy en día estamos viviendo una concentración en el mercado del ERP hacia las soluciones que ofrecen las multinacionales del software. Las empresas de fabricantes nacionales son adquiridas por las multinacionales, más para hacerse con la cartera de clientes y eliminar un competidor que para asimilar el conocimiento de gestión que éstas puedan aportar.
También es importante considerar que las aplicaciones de las multinacionales han sido desarrolladas para satisfacer las necesidades de empresas que son o fueron “grandes cuentas”.
Así pues, la Pyme se ve, cada vez más, abocada a tener que escoger entre las grandes aplicaciones de las multinacionales cuando muchas veces no tiene capacidad financiera para pagar un barco tan grande, ni la tripulación necesaria y ni mucho menos puede pagar las modificaciones en una nave que salió del astillero con unos horizontes de gestión amplios, pero que pueden no ser capaces de contemplar el modelo de organización que se plantea a un coste razonable.
A la vista de esta situación, que no es nueva pero que va a más, el grupo privado de investigación al que pertenezco ha decidido echarle valor al asunto y diseñar a partir de nuestra experiencia y capacidad investigadora y desde cero una aplicación de gestión específica para las Pymes industriales.
Hemos empezado investigando y desarrollando una nueva metodología para definir y gestionar la estructura de cualquier proceso o producto, de manera que, gracias a su abstracción de diseño, tenga cabida cualquier modelo de producción, tanto el modelo discreto como el de proceso o cualquiera que se encuentre entre ellos (híbrido) y además con elevado nivel de control sobre los parámetros clave del negocio industrial.
Pretendemos integrar este sistema con otros subsistemas como SCM o APS para dar lugar a un nuevo marco de gestión de la producción adaptativo, prospectivo y conducido por la demanda (Universal Manufacturing) que ponga al alcance de la Pyme esa plasticidad funcional que necesita, sin pagar más tributo que el de definir sus necesidades.
En última instancia esta línea de investigación pretende transferir sus resultados a la empresa, armonizar la relación entre la Pyme y los ERP y facilitar la adopción de estas herramientas de gestión como factor de competitividad.
Pensamos también que estas iniciativas de I+D+i, que cualquiera podría opinar que van a contracorriente de esa tendencia a la concentración y dominio del mercado por parte de las multinacionales del software, son las que nuestro país necesita para progresar a medio y largo plazo. Que no hay que tirar la toalla y que hay que estar ahí. Tenemos en este país gente muy preparada que, precisamente en este cambio de ciclo económico, no debe desaprovecharse bajo ningún concepto. Probablemente sea el momento de fomentar el I+D nacional pero de verdad, sin discursos políticos y con fundamento.
Animo a los emprendedores y a los inversores a trabajar para ello, que de capital humano creativo y bien formado estamos sobrados.
Saludos,
Investigator